Celler Batllé resume en cada botella la filosofía artesanal de la casa Gramona.

Este espumoso es el resultado de una viticultura sostenible y consciente, siguiendo una filosofía de viticultura biodinámica en las fincas familiares del paraje Font de Jui en el Penedés, enteramente labradas con caballos y vendimiadas a mano.

Durante los más de 110 meses que reposa en las cavas, todos y cada uno de los pasos de la elaboración se llevan a cabo manualmente, por parte de los artesanos que han aprendido el oficio de esta prestigiosa casa.

Un pionero en la elaboración de cavas de largas crianzas. Mestres Visol es un espumoso seco y muy elegante, con una burbuja muy fina y un final largo y persistente.

Este cava ha sido elaborado con vinos de reserva procedentes de cepas viejas de las variedades Macabeo, Xarel·lo y Parellada de más de 50 años. 

Este cava realiza su primera fermentación alcohólica y crianza del vino en acero inoxidable y en botas de castaño durante 6 meses. La segunda fermentación la hace en botella con tapón de corcho natural y crianza en botella con las lías durante más de 6 años en rima.

Además se realizan removidos de las botellas en rima para favorecer así el proceso de autólisis de las levaduras, consiguiendo una mejora de estructura y complejidad. El degüelle se realiza de manera manual. 

Recaredo Terrers es el Brut Nature tradicional de esta casa que forma parte del territorio Corpinnat, un sello de calidad que aúna a las bodegas familiares más  emblemáticas de la zona. Este espumoso destaca por su profundidad, luminosidad y frescura. 

Representa la expresión más sincera del Alto Penedès, una zona vitícola milenaria, y está elaborado a partir de un selecto mosaico de viñedos que siguen los criterios de la viticultura biodinámica, situados en suelos muy calcáreos que dan tipicidad y carácter a los espumosos de larga crianza de la zona. 

En 1978, Agustí Torelló materializó su sueño de elaborar un cava excepcional con su primera cosecha.

Con dos décadas de experiencia, creó las primeras botellas de Kripta en su bodega de Can Rossell, utilizando un cupaje de las exclusivas parcelas del Penedés.

La distintiva botella ánfora, concebida y patentada, rinde homenaje a la Antigua Roma. La etiqueta, diseñada por el artista Rafael Bartolozzi, evoca el Mediterráneo de Cadaqués, la vid y el olivo: trilogía de los clásicos.

Kripta es el cava más galardonado de forma ininterrumpida desde su primera medalla de oro en 1984 en la antigua Bratislava. Cada añada representa un premio que refuerza su excelencia.